Es una sorprendente técnica procedente de China. Consiste en la realización de un masaje con esferas metálicas en cuyo interior se encuentra un diapasón, el sonido de las esferas, equilibra la “disonancia” de los campos energéticos, haciéndolos entrar en “consonancia”, y de esa forma poder prevenir o mejorar diferentes tipos de dolencias, cuadros de estrés, cansancio etc. Se estima que estos accesorios producen entre 20 y 48 vibraciones diferentes. La rotación por las distintas partes del cuerpo de estas esferas produce múltiples beneficios sobre el organismo.
- Contrarrestar el desequilibrio del sistema corporal
- Circulación libre de la energía en el cuerpo
- Mejora el tono muscular
- Fortalece los huesos
- Despeja la mente
- Elimina la fatiga
- Relajación total
Dentro de las diferentes técnicas en que se emplean estas esferas, el automasaje es una de las más usuales y sencillas, ya que sólo requiere un poco de tiempo y concentración. Consiste en tomar ambas esferas en una sola mano para hacerlas girar; el punto de partida es el dedo pulgar, empujando una hacia la parte interna de la palma hasta lograr que la otra se desplace, formando con ambas un movimiento circular en el que no deben ser friccionadas. Durante unos minutos (puede iniciar con 1 o 2 para aumentar paulatinamente), el giro debe realizarse en el sentido de las manecillas del reloj.
También se efectúan masajes integrales (todo el cuepo), realizado por un terapeuta profesional. La sesión dura entre 30 minutos y una hora. Pruébalo y verás lo placentero que resulta. Adelante!
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